Hace algún tiempo, Diego @temperanciacolmenas, un vecino del barrio nos propuso introducir la apicultura urbana como experimento en el proyecto.
Nos pareció una idea genial, puesto que la situación de las abejas en el mundo es bastante desafortunada actualmente. Los pesticidas, el monocultivo, el humo, el cambio climático.... está acabando con ellas. Y es irónicamente en las ciudades donde estos insectos sin los cuales es muy difícil la polinización, encuentran su refugio. Las recientes políticas de prohibir el uso de pesticidas químicos en los parques y jardines han beneficiado en gran medida a las abejas, que encuentran en las ciudades una mayor variedad de flores y especies con los que continuar su incesante trabajo.
Esta experiencia terminó el pasado mes de Junio, tras la cosecha de la Miel del Cabanyal; un producto único, por su poca cantidad y por su gran calidad. Ha sido increíble y hemos vivido grandes momentos con ellas. Hemos podido utilizar los panales en clase con l@s niñ@s durante el curso y les hemos transmitido la importancia de estos insectos así como intentar erradicar el miedo que existe.
Ha sido difícil, sí. El miedo es algo intrínseco al ser humano, pero algo de lo que también es necesario despojarse en el camino.
Así, algun@s hemos podido vivir la experiencia de cambiar núcleos, comprender sus procesos, su inteligencia y movernos entre ellas aceptando alguna picadura como un mal menor!
La importancia de las abejas en la ciudad de Valencia está tomando relevancia, así se han hecho eco de nuestra experiencia con Temperancia Colmenas en el periódico Valencia Plaza, donde cuentan otras experiencias "oficiales".
Esta experiencia ha terminado, necesitamos apoyos para poder desarrollar la actividad de forma segura y controlada; por lo que esperamos que el próximo curso podamos establecer comunicación para oficializar este y otros asuntos para favorecer la agroecología y el desarrollo sostenible de nuestro barrio.